domingo, 12 de abril de 2009

SAP, ABUSO SEXUAL INFANTIL NO: UN PERVERSO Y SU ESTAFA, por la Lic. Mónica L. Creus Ureta (psicóloga).

http://www.estudio-juridico-abogados.derecho-de-familia.com.ar/planificacion-sucesoria/es/Articulos/C_-_Psicolog%C3%ADa/506/SINDROME_DE_ALIENACION_PARENTAL_(SAP).htm

1 comentario:

  1. Llamale SAP... llamale manipulación... llamale como quieras pero lo real es que esto existe:
    Te dejo un texto para que me des tu opinión:
    CUANDO DEJAMOS DE SER PADRE O MADRE
    La lucha por la igualdad sigue su avance, y un día sí y otro también lo vemos reflejado en nuestra sociedad, en el ambiente, en el trato, en todas y cada una de las cosas que rodean nuestra vida.
    La palabra igualdad es mucho más compleja de lo que parece, porque ante todo y sobre todo debe de ir basada en igualdad entre personas, teniendo en cuenta que como personas somos únicos e irrepetibles, y por supuesto cada uno con sus particulares virtudes y defectos, sus egoísmos, sus debilidades y lo más delicado : sus maldades. Una vez que tenemos esta base de arranque para pensar en la igualdad, ahora ya pasamos a distinguir que dentro de las personas estamos del sexo femenino y del sexo masculino. Si enlazamos una cosa con otra, quiere decir que cada uno, seamos de un sexo u otro, tenemos nuestras cualidades personales. Por esto digo que la igualdad debe estar basada en las mismas oportunidades, derechos y obligaciones para todas las personas, independientemente del sexo, raza o religión, tal y como dice nuestra constitución.
    Todo esto que comento viene derivado de mi observación, triste y lamentable debo decir, de algunos casos en los que una madre o un padre, dejan de serlo para ser solamente eso, PERSONA, y como tal si no eres buena, tu hijo es lo que menos te importa. La intención es dañar a otra persona, aunque ésta sea estupenda y maravillosa, que todo sea dicho, es más fácil.
    He tenido ocasión de conocer esta situación en ambos casos, lo que corrobora la conclusión de que al fin y al cabo somos personas, da igual hombre o mujer. Pero en el caso de las mujeres, nos han puesto tantas armas legales a nuestro servicio, que se ha convertido en algo sumamente fácil cuando queremos dañar a un hombre. Toda ley, toda ayuda es siempre bien recibida para avanzar cada vez un poco más en la búsqueda de esa igualdad de oportunidades, de derechos y de obligaciones, por eso a mí, personalmente me resulta bastante lamentable, que lo que han conseguido muchas mujeres en sus luchas, reivindicaciones, y demás, sea pisoteado y menospreciado por muchas mujeres, en esencia malas personas, que llegan a dejar su papel de madre como tal, y utilizan a sus hijos como arma arrojadiza contra la otra parte, en este caso el padre, haciendo mal uso de esas leyes y protecciones que actualmente tenemos las mujeres.
    Hay personas sumamente posesivas y llegan a actuar con sus hijos como si fueran una propiedad únicamente suya, manipulando su vida, sus pensamientos y sus actos, lo que es verdaderamente fácil cuando son unos niños y en ese momento es cuando dejan de ser padres o madres, y pierden totalmente la objetivad de las cosas porque no valoran el gran daño que ocasionan a esos niños que se están formando como personas. Actualmente a este síntoma le denominan SAP (Síndrome de Alienación Parental); sea como sea, y le que pongan el nombre que le pongan, no deja de ser una manipulación de la personalidad indefensa en toda regla.
    A todo esto hay que añadir que la justicia también está impartida por personas, y como en cualquier otro trabajo y ocupación, las decisiones y sentencias que afectan seriamente a una persona, están dictadas por otra persona que en muchas ocasiones está saturada de expedientes por sentenciar y que vienen con un lastre burocrático difícil de desenredar; y todo esto puede sonar un poco raro, pero a la persona que le toca vivirlo puedo asegurar que se convierte en una verdadera pesadilla.
    Desde mi persona, animo a todas aquellas que estén pasando por una triste historia de este tipo y no encuentren el modo de hacer entrar en razón a la otra parte que ha dejado de lado su papel de padre o madre, para que dejen constancia y pruebas de ello, para que una vez que los hijos tengan la madurez suficiente para tomar parte, lo puedan hacer con todas las pruebas posibles a su alcance, y tarde o temprano, cada persona queda en el lugar que le corresponde, de eso no me cabe ninguna duda. Y también sigo animando a luchar a favor de una igualdad digna para todas las personas, sean hombres o mujeres, por una justicia más implicada, más modernizada y también a seguir luchando por ser sobre todo BUENAS PERSONAS.

    FDO. Una de tantas personas del mundo (femenina).
    Ahhhh se me olvido dejarte la referencia de mi blog... echale un vistazo... te gustará.

    www.angelmoreno.es

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